… pero la lealtad, la iniciativa, la devoción y el entusiasmo de nuestros compañeros de faena, hay que ganárselos.
Así versa la filosofía del Management de Clarence Francis.
Como propietarios, gerentes o jefes de negocios de comida, donde el trajín, el calor, tantas horas de pie, las cortadas, el ruido, los pocos espacios para relajarse, etc., nos impactan día a día, ¿qué hacemos para ganarnos la voluntad, el esfuerzo y el compromiso de nuestro equipo de forma sostenida?
La frase «si no te gusta, vete» es bastante usual en los negocios gastronómicos. La alta rotación es frecuente.
Es lugar común decirlo, pero en ocasiones olvidamos que cada empleado tiene un sueño, distinto al nuestro. Que tiene necesidades y problemas personales y que al igual que uno, siente y padece.
No existe una fórmula mágica para ganar lealtad, iniciativa, devoción y entusiasmo. Sólo sé que hay que lograrlo a como dé lugar.
Hay maneras para ganar en doble vía, para el negocio y su gente. El dinero es importante, sí, es cierto, pero solo no tendrá resultado si no pensamos en educar, entrenar, entretener y celebrar.
Más allá de los métodos que selecciones para ello, hay 3 elementos que debes mantener en alto y que tu gente perciba que quieres lo mejor para todos:
- Da lo mejor de tí. Eres más que sólo el que manda, por eso debes modelar como cabeza del equipo.
- Presta atención especial a sus problemas. A veces es complicado y complejo pero se puede conocer de primera mano lo que ocurre al personal.
- Brinda apoyo en situaciones repentinas. Tu gente estará agradecida al ver que es valorada como ser humano en diferentes circunstancias.
Una experiencia personal. Cuando comencé un restaurante tuve una brigada formada por 12 personas en cocina y 9 en el salón, contando la caja y la barra. Total, 21. Luego de tres años el mismo restaurante funcionó con 14 empleados. Lo logramos conociendo muy de cerca a cada una de las personas que estaban junto a nosotros y su potencial de desarrollo.
Es imperativo invertir, sembrar y apostar por la creación y consolidación de un equipo de trabajo robusto, que comparta tus valores y tú comprendas la situación de cada uno. Un equipo con el cual se puedan cosechar, recoger y compartir los frutos de tanto trabajo, y sobre todo para que cada vez hayan más clientes fieles y satisfechos.
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